lunes, 4 de febrero de 2013

Crítica: "Hitchcock"

Genio, maestro del suspense, adelantado a su época, mago del cine... Muchas han sido las alabanzas que ha recibido uno de los directores más grandes e influyentes del cine, el gran Alfred Hitchcock. Ahora, como si se hubiera reencarnado en Anthony Hopkins, vuelve a la actualidad con una biopic de Sacha Gervasi que retrata el rodaje de uno de sus títulos más aclamados y arriesgados, la terrorífica "Psicosis".

Mucho se había hablado de lo infructuoso del rodaje de la película "Psicosis"; sin duda, uno de los films más personales del director. Pero siempre quedan anécdotas, perfiles personales y familiares y situaciones desconocidas que consiguen sorprender al espectador. "Hitchcock" logra atraer la atención del público gracias a una acertada conciliación entre la vida profesional y la vida personal del director.

Así, descubrimos su inevitable interés en las mujeres rubias (algo que ya sospechábamos), su ingenio, su manía de no mirar tras la cámara porque "todo lo que se va a rodar ya lo he visto en mi cabeza" y, sobre todo, la enorme importancia que tuvo en su vida la presencia de su mujer Alma. Lo malo es que nos quedamos con ganas de más, de saber aspectos más personales e incluso superfluos del increíblemente nunca oscarizado Hitchcock.

Al centrarse toda la trama en una época muy concreta de la vida del artista, nos perdemos mucha información que una biopic como ésta podría haber explotado con éxito. Sus inicios, su carrera profesional, sus anhelos, su capacidad para contar historias, su exitoso paso por la televisión, ... En definitiva, una visión más completa y compleja del personaje retratado.


De todas formas, hay algo en la estética de la película que huele a Hitchcock. Esos comentarios directos al espectador, la música, los estudios de grabación, la ambientación, etc hacen creíble una historia que se apoya en sus dos pilares básicos: Anthony Hopkins y Helen Mirren. Ambos componen una pareja perfecta, real y nostálgica. Magos de la interpretación para un mago de la realización.

Seguro que Hitchcock, incluso en su propia biopic, habría dado lo que fuera por hacer uno de sus famosos cameos; y nosotros hubiéramos dado lo que fuera por volverle a ver en los títulos de crédito de una película de intriga. A veces es bonito soñar.



José Daniel Díaz

2 comentarios:

  1. Una buena historia, bien contada, con un Hitchcock amable que muestra ante la pantalla todas sus neuras y debilidades de la mano de Alma, su comprensiva esposa. Buenas interpretaciones para una película que hace pasar un buen rato. Un saludo!

    ResponderEliminar
  2. Coincido contigo, creo que parte de la crítica ha sido excesivamente dura con la película. A mi me parece muy recomendable y con grandes interpretaciones

    Un abrazo!!

    ResponderEliminar