domingo, 17 de noviembre de 2019

"Dios existe, su nombre es Petrunya" y "Little Joe" se presentan en el Festival de Sevilla

Esta jornada la sección oficial ha traído dos películas interesantes: la macedonia "Dios existe, su nombre es Petrunya" de Teona Strugar Mitevska y la austríaca "Little Joe" de Jessica Hausner.


Además el día se ha completado con dos películas de la Sección EFA: la danesa "Reina de corazones" de May el-Toukhy y la polaca "Mr Jones" de Agnieszka Holland.

Comienza la Seccion Oficial con la película basada en hechos reales que recibió los premios Guild y del Jurado Ecuménico en la Berlinale, además de ser finalista en los Premios LUX. "Dios existe, su nombre es Petrunya" de Teona Strugar Mitevska cuenta cómo cada mes de enero tiene lugar el mismo festival en un pequeño pueblo de Macedonia. Uno de los sacerdotes de mayor rango eclesiástico lanza una cruz al agua que un grupo de hombres ha de buscar. Se dice que aquel que la encuentre tendrá para siempre buena suerte en la vida y prosperidad.


Sin embargo, este año es una mujer, Petrunija (Zorica Nusheva), quien tiene la suerte de encontrarla. Dado que vive en una sociedad basada en antiguos códigos morales y sociales, la comunidad de hombres se siente con el derecho de estar enfurecidos. ¿Cómo es posible que una mujer se haya atrevido a hacer lo mismo que ellos, teniendo éxito en el proceso? Sin embargo, Petrunija se siente la legítima ganadora del concurso y no está dispuesta a devolver la cruz bajo ningún concepto. 

La directora Teona Struger arranca, divertida, sarcástica, visualmente potente. A medida que avanza se acabará convirtiendo en algo decepcionante, sobre todo en su apresurado final. Un final poco convincente, debilitando todo lo que la fugaz heroína había conseguido, la igualdad de géneros. Ese final atropellado lo deja solo en un aprobado aunque los personajes femeninos se salgan de lo convencional.

Una de las películas de la Sección Oficial más esperadas es "Little Joe". Alice (Emily Beecham) es una madre soltera que cría plantas en una empresa que busca desarrollar nuevas especies. Es la responsable del exitoso último diseño de su compañía: una crisálida característica no sólo por su belleza, sino también por su valor terapéutico. Si la planta se encuentra en las condiciones óptimas, garantiza a quien la consuma sentir algo parecido a la felicidad. Un día, Alice decide ir en contra de las normas de su empresa y lleva una planta a Joe (Ben Whishaw), su hijo. Ambos la bautizan como "Little Joe" ("Pequeño Joe"). A medida que crece, Alice comienza a entender que tal vez su nueva creación no es tan inofensiva como sugiere su nombre.


Dirigida por la austriaca Jessica Hausner ha dirigido "Hotel, Rita, Lourdes, Amour Fou", es una sorpresa que se lanzara con una de terror científico, psicoanalítico y social, de mutaciones genéticas, con una atmósfera totalmente estilizada la perfección. Todo su conjunto, basada en las emociones de sus protagonistas, una relación entre madre e hijo, jugando con lo verdadero y lo falso, nos habla de las relaciones humanas, y el gran acierto de Hausner, es que algo malo, perverso, y macabro va a pasar, si no en esta escena, en la siguiente. Todo lo convierte en ambiguo, falla la banda sonora, ese sonido chirriante, que a veces no deja escuchar los diálogos. 

Una película pequeña, ambiciosa, sugerente, y con un final que no le dejará indiferente, aunque no es todo lo que parece en esta trama psicológica de aires cronenbergianos. La actriz principal Emily Beecham ha sido premio a la mejor actriz en el festival de Cannes por este papel.

Una de las películas más redondas y completas la hemos encontrados en Sección EFA con la danesa "Reina de corazones". Annie tiene aparentemente una vida perfecta. Gracias a su reputada carrera como abogada y al trabajo igualmente exitoso de su marido Peter como físico, este matrimonio puede permitirse vivir en una moderna casa en el campo, rodeada de todo tipo de lujos. Así, y aunque ya tienen dos hijas, esta pareja encarnada por Trine Dyrholm y Magnus Krepper decidirá un día acoger al hijo que este último tuvo en una relación anterior. La llegada de Gustav trastocará por completo la armonía de Annie. El joven muchacho despertará en ella unos sentimientos que, de primeras, parecen completamente liberadores. De esta forma, la mujer decidirá embaucarse en un secreto affair con su joven y pasional hijastro, haciendo frente a todos los obstáculos que pueden surgir dada su diferencia de edad y su situación familiar.


Trine Dyrholm (Premio Ciudad de Sevilla en 2018) es la verdadera villana, deslumbrante en su interpretación, que va hacia la deriva a pesar de tener su vida resuelta. Nos toca todas las teclas para observar y no ser indiferentes con todo lo que acontece entre lujosos interiores de diseño nórdico y escarceos en el campo con una depredadora sexual. La cinta lo muestra todo, de manera explícita, y nos lleva por lo emocional y físico, ese placer culpable, que nos hace recordar la película "Infiel". Un apasionado drama erótico, unas de las sensaciones del Festival.

Y para finalizar "Mr. Jones". Basada en hechos reales, cuenta la historia del periodista galés Gareth Jones (James Norton), y su viaje a Ucrania en 1933. Él es un intrépido investigador que ha tenido oportunidad de entrevistar a Adolf Hitler. Cuando llega a Ucrania con su cámara en mano, Jones no tarda de encontrarse cara a cara con el hambre en el país. Sin embargo, los hombres de Stalin no están dispuestos a permitir que el periodista descubra cómo las medidas del dictador han destrozado a los habitantes de Ucrania. Ninguno de ellos dejarán que Jones desvele la hambruna soviética al resto del mundo. Esta noticia también le pone en contra del periodista stalinista Walter Durante (Peter Sarsgaard).


Lo que debería de ser un drama y un thriller potente,una fascinante historia, con una factura impecable de ambientación, vestuario y artístico se queda en una película deforme, contada desordenadamente, frutada y sobrecargada a lo largo de sus 141 minutos. Sin propuesta de escena que sean coherente, la directora polaca Agnieszka Holland no consigue diferenciar el personaje del periodista, lo histórico de lo humano, sin olvidarnos de los recursos dramáticos o directamente risibles.

José Antonio Díaz Domínguez
@Jose_A_Diaz_Do
Festival de Sevilla 2019

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