The Wrestler (El luchador) es una película de perdedores; en cierta manera recuerda a "Leaving Las Vegas". Un hombre dedicado a la lucha libre en el ocaso de su carrera busca la felicidad intentando recuperar a su hija y una vida nueva al lado de una mujer que trabaja en un club de strip-tease. Pero lo que no se ha sembrado durante años es difícil recuperarlo en unos días.
Mickey Rourke está realmente contenido en su personaje. No busca la exageración ni la lágrima fácil pero con una serie de detalles te transmite todas las sensaciones que necesitas. No se si será algo pasajero pero por este camino puede llegar a ser lo que nunca pudo: Un actor respetado. Marisa Tomei aprovecha su pequeño papel y da una gran réplica al protagonista absoluto de la historia.
El guión maneja perfectamente los tiempos; cambia los escenarios con soltura aportando algo nuevo al personaje en cada escena. Así podemos encontrar al luchador en compañía de sus amigos divirtiéndose, trabajando en una carnicería, ligando con una chica, sacando su lado más tierno junto a su hija,.... muchos registros que mantienen una línea argumental perfecta.
Una película muy aconsejable que no deberían perderse. Quizás sirva para aprender algo.
José Daniel Díaz
Estoy contigo Dani, muy aconsejable, quizás su problema es que refleja ciertos tópicos, un poco recurrentes, pero merce la pena verla.
ResponderEliminarEsta claro que Aronofsky retrata mejor lo gris que lo brillante de la vida.
Saludos...
Me gustó mucho, hacía mucho tiempo que no veía una película tan carnal y de tanto nervio como ésta. Y que haya sido marginada del oficialismo conservador de los oscars, habla muy bien de ella.
ResponderEliminarSaludos.
Realmente sorprende que Mickey Rourke no recibiera el premio... No niego la gran interpretación de Sean Penn pero lo que transmite "El luchador" merecía reconocimiento.
ResponderEliminarTroncha, a veces los tópicos transmiten realidad...
Un abrazo